Así veo lo de "COSAS" (I).

© Victoriano Rodríguez Dávila.

 Me dicen algunos amig@s tanto reales como virtuales que participe, que diga algo sobre “cosas”, que soy cofundador, que opine … , y como quiera que nunca me escondí, ahí va lo que pienso y lo hago desde mis medios, ya que soy muy respetuoso con la propiedad privada. Podemos decir que el fascismo como ideología no se sostiene hoy en día, tal que práctica política, como que no, pero en el talante de gentes que todos conocemos sin duda alguna que sí. El fascista utiliza cualquier medio para intentar manipular la opinión de otros tratando de dirigirla en contra de quien no le agrada o ve como un enemigo en sus acciones en referencia a lo colectivo. En la realidad, pero sobre todo en el seno de grupos virtuales de comunicación, germina ese talante fascista alimentado por el afán de "bienintencionadas" acciones que dicen pretender "culturizar y salvar" a la humanidad, pueblos, organizaciones sociales, colectivos o simples grupos de redes sociales tal que facebook, twiter …, y salvar fundamentalmente del rojerío, que se decía en tiempos del innombrable y funesto dictador, rojerío al que ven desfasado, causa de males para el progreso social, acicate de enfrentamientos, exterminador de libertades y dañino para el desarrollo intelectual y ético del ser humano. Los casos de algunos personajes y personajillos del grupo, que encima tienen la desfachatez de ir presumiendo por ahí de que van por “libres” ocultando intenciones, permite destapar su talante fascista por más que entre ellos se apoyen o clamen la permanencia de un pretendido liderazgo que no es otra cosa que un “estás conmigo o estás contra mi” muy propio de quien ejerce pensamientos totalitarios, “actitudes de ordeno y mando”, “democracias sui generis”, “cumplan normas que yo doy”, “yo cumplo con lo que me interesa” , “me salto a lo goyesco los acuerdos que colectivamente se deciden”, “nombro a dedo”, “oculto información”, “digo aquello que está bien y lo que no” “mando mensajes vía interna recriminando lo que a mi me parece”, etc. etc. Y es que este tipo de gente, cuando se les pilla en un renuncio y se les hace alguna observación que no les agrada, dicen: “ me estáis acosando”, “me perseguís”, “no respetáis la libertad de los demás” … , y otras lindezas del ámbito de los enrocados en su ego y en ver enemigos tras cualquier esquina, si además añadimos un carácter amenazante no exento de intenciones de violencia física o verbal, el retrato de un “fascista” queda que ni pintado, aunque a veces y con esto de las nuevas tecnologías en lo de las “afotos digitales” se nos haya ido el puntero en dar tonos y lo pongamos demasiado “colorao”, tema por otra parte que este tipo de gente desconoce, a no ser que le venga por genética, ya que no sienten vergüenza alguna en su proceder con otras personas. Y es que me comentan amig@s, que las “cosas” no andan bien en el “grupo feisbusero” de mi pueblo , debido fundamentalmente a la actitud prepotente y manipuladora de algún@s personajillos que creen detentar un supuesto poder de influencia cultural en lo real o virtual, que solo ellos se creen y que nos ha llevado a un tutelaje, control y dirigismo incompatible con la democracia. Ya sé que hay compañer@s, los más, a quienes aprecio y mucho, que por el mero hecho de que no se pierda “cosas”, transigen, ell@s están exentos de lo que aquí denuncio, pero por desgracia “los menos” son los que llevan el cotarro y así las cosas van como van. Los titulares sesgados permiten sibilinamente atacar a oponentes, reales o imaginarios y facilita la manipulación de los lectores menos avisados que podrían pensar que existe una especie de ataque del rojerío, que son quienes entorpecen los fundamentos de la democracia y la libertad. Precisamente es todo lo contrario, están exponiendo de parte e interesadamente una situación con más sombras que luces a sabiendas que no se tiene razón y que los argumentos que tratan de defender son incompatibles con la ética y la estética, débiles en su funcionamiento, inconexos con la realidad de la calle, y contraproducentes para el desarrollo de cualquier proyecto por muy ilusionante que este sea. En un estado de derecho, quien abre una causa sin autoridad moral y política para ello, con objetivos oscuros, y que lo único claro es realzar figuras de talante fascista que dominen el panorama de grupos o colectivos para así contrarrestar a quienes persiguen el debate y la confrontación de ideas para un mejor funcionamiento y desarrollo de las relaciones humanas en la sociedad y los subgrupos que la conforman, digo que quienes abren causas así estas se ven abocadas al fracaso. En un proceder democrático es la ley, las sencillas normas que se acuerdan, las que deben imponerse y no las "buenas intenciones" de nadie, máxime cuando están torticeramente inclinadas por intereses ideológicos rancios, creencias religiosas determinadas e intentos de hacer ver que los intereses de algunos son sacar rédito político para un partido determinado. Varios somos los amig@s que vemos claras intenciones manipuladoras y de carácter fascista en la defensa a ultranza de personajes con más que probadas actuaciones que dejan mucho que desear en el grupo del facebook “cosas de Quintana”. Pienso que much@s quintanej@s se han retirado, otr@s no participan, algun@s no quieren que se les regañe y entre todos la mataron y ella sola se murió. De momento quien suscribe en “stand bay” y a la espera de acontecimientos. No se dan cuenta ciertas personas que en la cultura del “rojerío” está muy presente la frase de “un paso para adelante y dos para atrás”. ¿Qué se pretende al defender lo que cae por su propio peso? ¿ Quienes son los que alientan desencuentros? Salud y república compañer@s


.