Jaleos extremeños.

Si consultamos un diccionario veremos que la palabra jaleo es sinónima de alboroto, alteración del orden, pérdida de la tranquilidad, ambiente alegre y/o ruidoso, etc. En el ámbito flamenco se denominan jaleos a todas aquellas exclamaciones, gestos o palmas que se utilizan para acompañar y animar el cante, el toque o el baile. De todos los estilos denominados, correcta o incorrectamente, jaleos sólo ha sobrevido el llamado jaleo extremeño. ¿Por qué? De todos es conocida la costumbre gitana de cantar en bodas, fiestas familiares, ferias, etc. Los cantes de los gitanos extremeños no sufrieron la influencia de otros estilos que los hicieran evolucionar. Cada familia, clan, localidad, grupo o intérprete va aportando sus variantes estilísticas sin salirse del esquema primigenio. A mediados del siglo XIX, en la órbita de los cafés cantantes, se ofrecen los bailes de jaleos para dar al espectáculo ambiente y aroma andaluz. Estos bailes se acompañan con cantes que empiezan a denominarse jaleos o chuflas y se hacen a ritmo de bulerías por lo que se cifra su origen en Jerez de la Frontera. A este género debió pertenecer la canción popular "Anda jaleo" grabada por Lorca y La Argentinita en 1.930. A principios del siglo XX se registran unas grabaciones que son ilustrativas de la confusión terminológica que reina por entonces en torno a la palabra jaleo: Sebastián Muñoz el Pena, Manuel Vallejo, El Niño de la Calzá, Carmen Amaya, entre otros, utilizan los términos jaleos y jaleos extremeños para catalogar lo que no son más que bulerías, juguetillos por alegrías, o fandangos aligerados y rítmicos. Esta grabación data de 1.946, le acompañan a la guitarra José y Paco Amaya, y aunque viene catalogada en el disco como jaleo por bulerías no tiene nada del jaleo extremeño y sí mucho de la bulería. En 1.947, con el genial guitarrista Sabicas, Carmen Amaya graba en Nueva York lo que titulan como jaleos canasteros que pueden considerarse como un auténtico jaleo extremeño. Algunas de sus letras han sido muy divulgadas dentro de este estilo. Después de las primeras décadas del siglo XX, el término jaleo queda ya, en exclusiva, para designar a este estilo autóctono de Extremadura. Me comentaba Ramón El Portugués,sobrino de Porrinas de Badajoz, coetaneo de Camarón de la Isla, en una noche flamenca dedicada a Extremadura en una bienal flamenca de Sevilla de hace unos años, que enseñó al Camarón a cantarlos.